Castilla-La Mancha, las vacaciones de tus clientes nunca han estado tan cerca
Castilla-La Mancha es una de esas regiones que sorprende por albergar una gran cantidad de rincones con encanto aún desconocidos por muchos viajeros españoles. Si tus clientes buscan un destino de interior variado y sorprendente, ¡Castilla-La Mancha es su destino!
Toledo capital. Es una de las ciudades más bonitas del mundo, con un casco antiguo que constituye todo un paseo por la historia de cristianos, judíos y musulmanes. En ella se pueden visitar la plaza de Zocodover, la mezquita del Cristo de la Luz, la iglesia de Santiago del Arrabal, conocida como la catedral del Mudéjar; y las sinagogas de Santa María la Blanca y del Tránsito. En el terreno artístico, destacan el Museo del Greco, el Museo Sefardí y el Museo de Santa Cruz, entre otros.
Cuenca capital. En las hoces de los ríos Huécar y Júcar emerge un mosaico medieval de callejuelas, cuestas y plazas que harán que tus clientes se enamoren de Cuenca. Las famosas Casas Colgadas son su principal atractivo, pero cuenta con otros lugares de interés como la catedral de Santa María y San Julián, el Museo Tesoro Catedral, el puente y el convento de San Pablo. Su gastronomía terminará de encandilar a los viajeros con platos típicos como el morteruelo, el ajo arriero, los chorizos, los zarajos…
El mundo del vino. Castilla-La Mancha es el mayor viñedo del planeta, donde se elabora aproximadamente el 50% de la producción total española, constituyendo así una fuerte identidad de la región y dando lugar a múltiples experiencias: visitas a viñedos y bodegas, catas, museos, exposiciones, fiestas… Existen varias Rutas del Vino con las que conocer este patrimonio: la de La Mancha, que conduce por los sabores cervantinos y quijotescos; la de La Manchuela, que comprende 23 municipios de Albacete y Cuenca; y la de Valdepeñas, con un Museo del Vino digno de visitar.
La naturaleza más cercana. Ya que la mitad del territorio está cubierta de bosques y montañas, cuenta con enclaves únicos como los parques nacionales de las Tablas de Daimiel y de Cabañeros. El Parque Natural de Lagunas de Ruidera sorprende por contar con numerosas lagunas y espectaculares cascadas. También es posible visitar, entre otros, las escarpadas Hoces del Cabriel, la Sierra de Ayllón, el salvaje Alto Tajo, la Vía Verde de la Jara, el nacimiento del río Mundo y los volcanes del Campo de Calatrava. En todos ellos es posible practicar numerosas actividades deportivas.
La vida rural. Los amantes de las escapadas rurales pueden encontrar a lo largo y ancho de las cinco provincias castellanomanchegas numerosos rincones con encanto, que suponen una vuelta al pasado, un paseo sosegado, visitas con calma, comida reposada, charlas amenas bajo las estrellas, un trato cercano con sus gentes… Pero también permiten un turismo más activo en sus parajes naturales para activar cuerpo y espíritu.